martes, 15 de marzo de 2022

CHALETS EN AVENIDA AZCAPOTZALCO

Por Don Nayarito Cantalicia  (Grupo Formiga)

La revista “Artes de México”, en su número especial sobre Azcapotzalco, Número 101, diciembre 2010, trata entre otras cosas, sobre las hermosas casas antiguas que hubo y existen aun sobre la Avenida Azcapotzalco, las cuales se levantaron inicialmente en la colonia El Imparcial, fundada en 1904. El tema de estas casas es muy lindo de mirar aunque sea desde la banqueta, o desde el auto en movimiento.

Planeaba escribir este artículo centrado únicamente en la la belleza arquitectónica. Pero al leer la mencionada revista decidí dejar mi enfoque a un lado, pues me fue muy reveladora la interesante relación entre estas casas y el auge petrolero de Azcapotzalco.

En sus páginas 44 y 45 dice que: “durante el Pofiriato se proyectó el crecimiento de la ciudad hacia las zonas periféricas por medio del fraccionamiento de la tierra… desde finales del siglo XIX, se empezaron a fraccionar ranchos y haciendas para construir zonas “campestres” con quintas de verano… los propietarios de estos terrenos tenían vínculos con personajes del sistema político y experiencias previas en el desarrollo de fraccionamientos en la ciudad de México”.

En 1907 se publicitaba en un folleto que: “Los lineamientos que debían seguirse para construir en la zona eran los siguientes: La construcción la hace el interesado enteramente a su gusto y solo tiene por condiciones sujetar le proyecto de fachada a la aprobación de la empresa, con el objeto de que ésta sea del mismo estilo de las que existen actualmente, dejar un jardín al frente de 15 metros y hacer las construcción aislada en medio del lote, condiciones que, lejos de perjudicarle en algo, le favorecen grandemente, porque contribuyen notablemente, no solo a la belleza de la casa, sino muy particularmente a la higiene de ella, porque recibirá el aire y la luz por los cuatro costados”.

Indica una vanguardia: “Se construyeron casas tipo chalets en las que se empleó el block de cemento armado como una novedad en la construcción”.

Para 1910: la colonia El Imparcial ocupaba el quinto lugar de los fraccionamientos distinguidos en el Distrito Federal después de las colonias Juárez, Roma, Condesa de Miravalle y Cuauhtémoc… el patrimonio de este periodo que aún se conserva nos da cuenta de la bonanza que tuvo Azcapotzalco como tierra de lujo y descanso durante el Porfiriato”.

En sus páginas 57 y 58, relaciona el tema de estas casas con el auge petrolero que había en Azcapotzalco. Dice sobre una empresa llamada El Águila, perteneciente a la Royal Dutch Shell,   que: “tendió el primer oleoducto que traía el crudo desde Papantla hasta la ciudad de México. Un impacto temprano de la refinería fue la construcción de residencias de estilo europeo para el personal directivo de la empresa británico – holandesa y otras familias adineradas, a lo largo de las vías de comunicación entre Azcapotzalco y Tacuba”.

En resumen: se fraccionaron los ranchos y haciendas, se comercializó la zona destacando la preferencia de gente empresaria extranjera del ramo petrolero o la clase conectada con altas esferas de la política, se dictó un estilo arquitectónico que debía autorizar la empresa que vendía los terrenos, y se alcanzó en aquella época ni más ni menos que el quinto lugar en atractivo habitacional en toda la ciudad de México.

Si pudiera decirse que la Avenida Azcapotzalco inicia en la Calzada México Tacuba (alcaldía Miguel Hidalgo), y que al cruzar las vías donde comienza nuestra alcaldía, es el kilómetro cero, entonces puedo comentar que desde ahí hasta la Catedral de Azcapotzalco son 2.2 kilómetros de distancia. Las referidas casas pueden observarse en el primer tramo de 1.3 kilómetros, es decir, de las vías hasta la calle Camino de Nextengo. Iba yo en auto con mi sobroino. En ese tramo pude contar 8 casas del lado izquierdo y 6 del derecho, que tuvieran ese aspecto muchas veces con techo de dos aguas, o con ese jardín rodeando la construcción. Después de Camino de Nextengo hasta la Catedral, no vi ninguna.

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