domingo, 17 de abril de 2022

 

MI VIDA EN LA PARROQUIA

Por Faty Kim Mingi

                                                     


Hola a todos ¡Ya los extrañaba!

Hoy les voy a contar  mi historia en la Parroquia de San Juan Bautista aquí en San Juan Tlilhuaca  y bueno empiezo con el chismecito vintage de  mis papás y de mi familia.  Ellos  se conocieron en el grupo de “La Hermandad de Jesús”.

Mi papá solo venía cada año para las representaciones de Semana Santa y participaba como soldado, él, mi tío Christian, mi tío Martín y mi abuelito “Pollo”; mi mamá ya cantaba en los coros, pero le dio curiosidad participar como encapuchada porque mi abuelita, mi tía Bertha, mi tía Sandra, también lo habían hecho, y bueno mi prima Yoci pero ella no cuenta porque como era muy pequeña cuando lo hizo enseguida se mareo y ¡Zaz! tuvieron que sacarla, así que fue su “debut y despedida” de las encapuchadas.

Me contaron que  mi bisabuelito Ascención y mi tío abuelo Jorge estaban en el grupo de  “Orden” en Semana Santa y Mi tío abuelo Humberto y su hijo se vestían como soldados romanos, mi tío Ismael fue de los primeros que representaron a los apóstoles.

Seguimos  con mi historia,  dos días después de que mis papás se hicieron novios,  mi mamá dio inicio al Coro “ Amigos de Jesús” en el año 2002 y dos años después se casaron, aunque yo me hice del rogar y que me tardo algunos añitos en llegar.

Mi papá se capacitó como Ministro Extraordinario de la Comunión Eucarística.

Me dice mi mamá que estando yo  en su pancita cuando cantaba y tocaba la guitarra y se detenía yo me movía hasta que volvía a tocar, así que yo creo que desde ese momento ya era parte del grupo o ustedes ¿Qué opinan?

 

Empecé a tocar desde pequeñita el pandero y después aprendí a tocar la mandolina, hoy toco un instrumento que  se llama “arpacordio” que  a su vez cuenta como tricordio, hago segundas voces en el coro y con frecuencia canto el salmo.

Por la actividad de mis papás técnicamente he pasado más tiempo en la iglesia que en mi casa y me conoce toda la comunidad parroquial, pienso que me quieren y  yo a ellos.

En el atrio me gusta mucho cuando nos toca cantar  las misas en las que va mucha gente, además tengo la ventaja de que veo todo en primera fila y nadie me estorba,  me divierto también cuando ponemos la tómbola en la kermesse porque veo la emoción que  sienten las personas cuando sacan su número y ven el premio que les tocó o en las expo parroquiales es una oportunidad para invitar a los chicos a que se integren al coro, aquí también puedo asistir a las posadas pero lo más chistoso fueron las veces tuve que hacer mi tarea justo en el atrio para la maestra Sandy y el profe Guillermo durante la pandemia.

Claro que aquí hice mi Primera Comunión y mi confirmación.

Cuando me disfrazo para el día de muertos seguro que tengo que ir a tomarme la foto en la ofrenda de la parroquia.

Otro momento divertido fue el día que vino mi tío Lupe vestido de Santa Claus y fui la primera en tomarme la foto con él.

¡Uf! Un recuerdo muy bonito fue cuando baile con mi grupo de hawaiano en las actividades que de la fiesta de San Juan.

Espero seguir teniendo momentos divertidos en compañía de mi familia y del Coro.

Si tienen algún momento divertido en su iglesia puedes comentarlo aquí abajo del artículo, me gustaría saberlo,  ya ven que eso de chismecito es lo mío.

 

                          

2 comentarios:

  1. Es muy hermoso tu relato y en verdad, alguien que comenta esas vivencias y alegría por cada momento vivido, transmite algo muy positivo, ojalá que más jóvenes sigan tu ejemplo

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  2. Por Tacubaya hay una iglesia que da las misas en inglés y los domingos se llena. El coto tiene hasta batería en sus instrumentos, y los cantos de los fieles se escuchan afuera con energía y alegría. Hasta dan ganas de meterse porque parece concierto. Eso me gusta. A la iglesia de San Antonio y Virgen de San Juan de los Lagos,en Azcapotzalco, los jueves el coro canta muy bien, pero el canto de "Hossana" el grupo le hizo un arreglo y cambios, que simplemente o hay forma de cantar con ellos, es muy compleja su versión. Los asistentes nomás nos vokteamos a ver con cara de "ni modo". Uno quiere cantar las alabanzas, pero si el artista local le hace cambios al "Hossana" pues, ya lo canto yo al modo tradicional de regreso a mi casa. Cada domingo cuando voy a Tacubaya, me da gusto lo unificado de la alabanza tipo concierto de esa parroquia que hasta baterista tiene. Saludos felicidades por tu artículo y gracias por tu entusiasmo

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