sábado, 17 de julio de 2021

 

LAS PETROLERAS, UN PLATILLO 

GASTRONÓMICO DE AZCAPOTZALCO

Por: José Carbajal Cortés, Cronista de Azcapotzalco

  Situémonos al norte de nuestra Ciudad de México, en un lugar con historia, vayamos al territorio del lugar de las hormigas u hormiguero en un tiempo en que fue el corazón industrial de Azcapotzalco, esto es en los linderos de la ex Refinería entonces perteneciente a nuestro Azcapotzalco.

  El origen de este platillo gastronómico de las llamadas “petroleras”, lo tenemos tiempo después de que se estableciera la compañía petrolera “El Águila” en 1933 que ocupaba 60 hectáreas y que años adelante, con la expropiación petrolera en 1938 por el presidente general Lázaro Cárdenas, se reinauguraría esta planta como “Refinería 18 de marzo” el día 20 de noviembre de 1946 por el presidente Manuel Ávila Camacho, que se incrementaría al expandirse a 174 hectáreas con una gran infraestructura en sus instalaciones y que después de años de servicio, es clausurada un 18 de marzo de 1991 cuando se da su cierre definitivo operando así casi 60 años como refinería. Algunos años adelante parte de sus instalaciones albergaran el “Parque Ecológico 18 de marzo”, que subsecuentemente habrá de convertirse en base a un proyecto gubernamental en el actual moderno “Parque Bicentenario” inaugurado en el 2010 a un costado del Metro Refinería.

  Situados ya en el lugar, he aquí viene lo interesante de nuestro platillo: ya que todo comenzó cuando a partir de la década de los 50´ y 60´, se abrieron varios establecimientos alrededor de las instalaciones de la Refinería, empezando a preparar sopes, tlacoyos y guisados y se cuenta que un día uno de los trabajadores de aquella planta pidió un sope y al verlo pequeño le dijo a la cocinera que ese sopecito apenas le alcanzaba para el antojo y entonces le pidió que le hiciera un sope grandote con más masa y dicen que la cocinera le hizo una “memelota” de masa y la preparó y que al verla sus compañeros, pidieron otras igual diciendo que éstas si son para “los petroleros” y de ahí en adelante para pedirlas les llamaron petroleras para los petroleros y de esta manera se dice que nacieron las ya famosas “petroleras”, asimismo es de mencionar que otra versión nos dice que fue una cocinera de un negocio de la zona aledaña a la refinería, quien ideo esta platillo haciendo un sope enorme para el hambre que traían los petroleros en sus intensas jornadas y mitigar así su necesidad de hora de comida. Este manjar se extendió así a través de los años, a todo lo largo y ancho de los barrios y pueblos de otrora y actual Azcapotzalco.

  Las petroleras llegan a medir 30 centímetros de diámetro o más en redondel, siendo una variante del sope, un “sopesote” cuyo secreto está en la masa y en su preparación. Este platillo gastronómico tiene un grosor de un centímetro, similar al sope ya que lleva untado frijol, queso rallado, cebolla bien picada, salsa roja o verde según el gusto y que además se le pueden agregar más elementos como: bistec, huevo, queso fundido, pierna, salchicha, lechuga, longaniza y hasta se preparan como “especiales” llevando de todo según la preparación pedida y el gusto del comensal pareciendo así una “pizzota”, mucho antes de que llegaran éstas.

  Así, este sabroso platillo se empezó a popularizar cada vez más desde los setentas hasta el actual 2020, por lo que la crónica nos dice que este platillo ha cumplido ya 70 años como tradición gastronómica en Azcapotzalco, siendo una delicia que se prueba si es original ya que si no, original petrolera no es, dice un dicho por lo que lleva su toque mágico en Azcapotzalco, con un sabor sin igual y que recién preparadas son una delicia, un manjar excelso por su masa e ingredientes empleados con un sabor inconfundiblemente chintololo.

  En Azcapotzalco en la calle de otoño, existió desde la década de los 70´s hasta los 90´s el famoso local “Las petroleras la güera” situado entre la col. Ángel Zimbrón y Clavería que era atendida amablemente por la Sra. Guillermina y su personal y a quien le llamaban cariñosamente como la “guera”, cuyas petroleras que elaboraban eran la delicia de la zona, después pasaría el negocio a otra persona cerrando sus puertas poco después del 2000. Asimismo, en la esquina de Aquiles Elorduy y Camino del Recreo, hace décadas, se encontraba un puesto que atendía una señora a quien se le conocía como doña “pachita” y dicen que preparaba unas petroleras que eran un manjar por su excelsa masa e ingredientes.

 De los negocios donde sirven este platillo, los más representativos en Azcapotzalco los tenemos presentes como el establecido en la calle de otoño número 48 esquina con Av. Aquiles Serdán, col. Ángel Zimbrón: el local Las Originales Petroleras de los primeros establecimientos al lado prácticamente de la Refinería desde 1950, reestructurándose en 1959 y hasta la fecha con sus puertas abiertas, por lo que va a cumplir ya poco más de 60 años de servicio tradicional en la zona, atendido amablemente por la Sra. Lorena Vallejo y personal. Asimismo, hay otros lugares emblemáticos como son: el local Antojitos La Petroleras, en la col. Euzkadi, Las Petroleras de San Andrés o Petroleras de La Güera en el barrio San Andrés y Las Petroleras y Huaraches Vero, en la Av. Aquiles Serdán 92, col. Pasteros rumbo al Rosario en Azcapotzalco.

Dice un dicho chintololo:

 Cuando tengas acaso un sinsabor en la vida, date un tiempo, un instante para probar una suculenta petrolera manjar azcapotzalca que no podrás resistir.

  Así podemos encontrar una docena de negocios o locales en diferentes puntos de encuentro en Azcapotzalco en donde preparan este platillo gastronómico original y genuino de la tierra de las hormigas como: en el Barrio San Lucas o el Recreo, Clavería, Barrio San Andrés, La Reynosa o Tepantongo, en la Ángel Zimbrón, en col. Euzkadi, Barrio San Marcos, Col. Pasteros y en el casco de Santo Tomás, lugares donde podrás hallar y degustar la petrolera de tu preferencia.

 


  En septiembre de 2019 se llevó a cabo la primera edición de “La Feria de la Petrolera y el Pulque” en el Parque Tezozómoc, organizado por la autoridad Delegacional, reuniendo a un número de negocios que prepararon este manjar y que esperemos que se realice en otra oportuna ocasión por las autoridades otra Feria más organizada en nuestro Azcapotzalco y con más participación de exponentes de este delicioso manjar genuinamente chintololo.

 

Bibliografía.

 

Álvarez de la Borda, Joel. Crónica del petróleo en México: de 1863 a nuestros días. México: Pemex, Archivo Histórico de Petróleos Mexicanos, 2006. Recuperado de https://www.academia.edu/390592/Cr%C3%B3nica_del_petr%C3%B3leo_en_M%C3%A9xico_De_1863_a_nuestros_d%C3%ADas?auto=download

 

Aponte, Edna. Relatos y recuerdos. Memoria de Azcapotzalco. México: Delegación Azcapotzalco, 1998.

2 comentarios:

  1. Las originales petroleras estaban cerca de la farmacia patria ya que ahí ivan a cambiar sus medicamentos los petroleros y de ahí se pasaban a desayunar el local estaba en calke otoño esquina Aquiles Serdán antes Parque via, me lo contó el papá de mis hijos que fue petrolero desde 1983 pero antes lo llevaron desde los 8 añis ya que su papá también fue petrólero

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  2. Muchas felicidades mi estimado Carbajal
    Como siempre una buena crónica 🙏

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